SOLTAR LA NECESIDAD DE DAR EXPLICACIONES
- Mercedes García-Rubio Glez
- 8 ago 2017
- 3 Min. de lectura
Mi abuela solía decir: - No des explicaciones, la gente que te quiere no las necesita, las que no te quiere ni les importa, los que te juzgan van a seguir haciéndolo de todas formas,y las explicaciones la interpretaran a su modo para tener más argumento para seguir juzgándote. Asi que no des explicaciones y menos cuando no te las piden porque ya tienen su planing de la realidad. Suelta la necesidad de que te entiendan, porqué habrían de hacerlo, si cada uno tiene una mirada distinta de "la realidad" ? No pidas que te den aquello que no sale espontáneamente del corazón del otro, si no le sale sus motivos tendrá, no exijas lo que no das, no esperes nada y aquello que te encuentres agradecelo.
Siéntate, respira hondo y observa como cada cual se coloca en el sitio donde elige estar, si es a tu lado disfrútalo, si no lo es, disfrútalo también, porque no hay mejor que estar acompañado de aquel que realmente desea estar a tu lado.
- Le oí atentamente, respiré y acepté que las cosas fuesen como son. Todo tiene un porqué y un para qué. Y empecé a ver más allá de los simples acontecimientos...observé el recorrido del movimiento y desde donde este era motorizado. Vi las distintas máscaras de los demás, y las mías propias, y entendí que pocos son los que no se esconden detrás de ellas. Somos el producto de los sueños de los demás en la búsqueda del reconocimiento, ese que jamás llegará porque donde únicamente habita es dentro de ti. Ese es el feliz reencuentro de todo aquello que llevamos dentro y que hemos buscado fuera.
A Veces, lo que más nos hace enfermar es la necesidad de estar justificándonos, dando explicaciones a aquellos que creemos debemos dárselas , siempre en espera de ser aceptados, comprendidos y al fin y al cabo amados.
Este es un clásico reclamo del niño interior , que él solito se auto-juzga, castiga y debe solicitar el perdón de los otros, no es un acto que hagomos desde la madurez, donde uno se da cuenta que es quien es, y que al actuar desde ese ser quien uno es, no cabe estar justificándose, porque fluye con la vida y los acontecimientos que se presentan en cada momento de la vida. El juicio o no de los otros, no debería tener una importancia relevante, pues siempre habrá distintas opiniones sobre una misma cosa, y cada una de ellas, será el resultado de la criva que cada cual hace según los programas instalados en su mente, esos que la educación, la familia, la sociedad te ha ido incorporando para ser aceptado y reconocido como miembro del clan. Esto no rinde pleitesía más que a aquellas creencias limitantes que hemos ido adquiriendo, que nos hace de filtro por el cual colar lo que creemos que nos acontece, lo que creemos debería ser, lo que juzgamos de admisible, de correcto, etc.
Muchos son estos programas y creencias limitantes que no nos permiten desarrollar nuestro máximo potencial, pues estamos a merced de esa criva automatizada que se dispara automáticamente por la cual filtramos todo aquello que nos rodea para dar el siguiente paso de forma "acertada y firme ", siempre sostenida por los distintos miedos que a estas les acompaña, miedo al rechazo, miedo a la exclusión, miedo a no ser queridos, miedo a que haya repercusiones que creemos serán negativas para nosotros... Y podríamos hablar largo y tendido de como toda esta red de limitaciones nos acompaña cada día impidiéndonos fluir y elegir de forma libre aquello que nuestra alma vino a experimentar.
MeGa Grg

Comments